Tuvimos el placer de ser recibidos por el Ing. Agr. Paolo de Luca, uno de los iniciadores de D&P Agro, empresa que comenzó en 2013 con asesoramiento productivo y haciendo experiencia también a campo de ensayos para evaluaciones de tecnología. Actualmente asesoran alrededor de 8.000 hectáreas de forma integral, con zona de influencias en Junín, Chacabuco y alrededores: hacia la parte este, la zona de Carmen de Areco y San Antonio de Areco; y al oeste la zona de Villegas. Hoy el equipo de D&P Agro está conformado por 10 personas: cinco ingenieros agrónomos, una administrativa y cuatro asistentes de campo.
Paolo nos cuenta que hay una amplia gama de perfiles entre sus asesorados. Pero independientemente de las necesidades y la adaptación a la tecnología de sus clientes, D&P Agro utiliza internamente herramientas para el equipo: como comunicación interna, y como parte del proceso del servicio que brindan.
Sobre este tema, Paolo nos comenta: “Un punto donde intentamos integrar a nuestros clientes con las herramientas es en los análisis de campaña. Donde intercambiamos información, conocimiento que se generó en esa campaña y que nos permite mostrarle también la herramienta que estamos utilizando, para que vayan amigándose con la digitalización. Porque más allá de la herramienta que utilicemos, necesitamos muchísimo la colaboración del cliente para poder tener una información correcta y con buena trazabilidad.”
Paolo habla acerca de SIMA como la plataforma integral para sus monitoreos y seguimiento de cultivos, y nos cuenta su experiencia: “El beneficio inmediato a través de esta herramienta es la mejora en la comunicación, ya que somos varios trabajando en distintas actividades. Es una manera de comunicarnos de forma agronómica: en un mismo idioma.
De las funciones que usan, ¿cuáles son las que ustedes le ven más valor o le dan más uso?
Todo lo relativo a la planificación de las campañas, porque nos da un marco para discutir y planificar la campaña con el cliente. Después, todo el seguimiento del lote con la aplicación. Eso es diario, lo usamos muchísimo en diferente intensidad. Por ahí depende del cultivo, del momento, pero la usamos continuamente.
¿Utilizan el stand por fotos?
Sí, desde luego que sí. El control de stand por foto es una herramienta importante para el tema de la variabilidad de siembra. La hemos utilizado muchísimo, obviamente es una cuestión operativa nuestra la de llegar siempre al momento óptimo para la toma del dato, porque tiene una ventana, lógicamente. Pero en las veces que hemos llegado bien, en el momento indicado, nos permitió ahorrar mucho tiempo en el lote.
¿Cómo ves la evolución de la tecnología?
La veo creciendo rapidísimo y de forma exponencial. La adopción un poco más lenta, por supuesto, pero creo que cada vez está más permeable el productor a incorporarla. O en nuestro caso, como figura intermediaria, también estamos abiertos a sumar tecnología, como ocurre con SIMA y otra herramienta que estamos utilizando en pos de dar un servicio más completo.
Y también, como hablábamos hoy de la trazabilidad, creo que cada vez es más importante saber que se hizo no solo en la campaña, sino en las distintas campañas, en cada lote, y creo que el productor de a poco va tomando esa conciencia. Y que haya un recambio generacional en los productores también hace que eso sea mucho más fácil.
¿Usás alertas zonales? ¿Qué pensás de esta funcionalidad?
No sólo la utilizamos, sino que la consideramos como una herramienta clave para prever y planificar porque nos permite anticiparnos a encontrarnos algo grave en el lote. En nuestro día a día es una herramienta muy importante, ya que a veces las extensiones que manejamos son variadas y grandes, y esta funcionalidad permite no solo anticiparse a lo que uno se puede encontrar, sino también planificar el tema de insumos, que la campaña pasada no fue nada sencillo. Fue realmente muy particular.